Mabel
Rosenvald de Baril
Coordinadora
"[...]
puedo decir que he sido el iniciador de muchas cosas y he prodigado
numerosas incitaciones de las que algo saldrá en el futuro. Yo mismo no
puedo saber si será mucho o poco. Pero tengo derecho a formular la
esperanza de haber abierto el camino a un importante progreso de nuestro
conocimiento."
Sigmund
Freud (1924), Presentación autobiográfica.
Reunir
en un volumen textos que aspiren a mostrar en su totalidad abarcativa al
psicoanálisis contemporáneo, es una tarea pretenciosa y poco útil. Aquí,
simplemente queremos presentarles una rica variedad de preguntas, temas,
cuestiones e ideas que interesan a los psicoanalistas en la actualidad, ya
sea desde la reflexión o la práctica, y que reflejan la vitalidad y el
crecimiento de nuestra disciplina.
Según
Mariano Caminos, autor de "Del acto al sujeto", su trabajo
"ha sido pensado como un ensayo que roza las fronteras del psicoanálisis,
entendiendo por ello no lo referido a la teoría, sino lo concerniente a
las posibilidades de intervención en los límites de aplicabilidad de la
'técnica' [...]". ¿Cómo puede producirse el viraje necesario para
posibilitar el advenimiento de una práctica psicoanalítica cuando
existen condicionamientos que la obstaculizan?
En
"Voces de la memoria y el olvido", Estela Noemí Daichman
plantea, a través de los ejes memoria y olvido, la necesidad de ciertos
cambios en la práctica psicoanalítica actual. Se propone una posición
en la que el terapeuta no se aísle del contexto social e histórico. A
partir de esta postura, considera la importancia del trabajo del terapeuta
con su memoria y su olvido, así como el del analizado, dentro del espacio
psicoanalítico, incluyendo la contratransferencia y la transferencia.
En
su trabajo "Globalización y transculturalización", Ana Lúcia
dos Santos Cesa realiza, en su introducción, una contextualización histórica
del concepto globalización desde sus raíces en el Renacimiento y en las
grandes navegaciones hasta su consolidación en el siglo XX. Señala la
polisemia del término en torno del cual giran numerosos estudios y
consideraciones que no se circunscriben al campo de los análisis económicos,
sino que se profundizan cada vez más al abarcar análisis geográficos,
culturales, sociológicos, psicológicos y político-filosóficos.
Sostiene que "la globalización pretende poner a disposición 'de
todos' lo mismo, homogeneizando en red la aldea global".
Subyacente
a la globalización de los mercados y de la tecnología está el proceso
de transculturalización, pretendiendo situar a todos en un "mismo
mundo", como si fuese posible una única lectura. ¿Qué
consecuencias provocan en el sujeto estas nuevas exigencias para la
subjetividad? ¿Cómo se define el sujeto moderno? ¿Cómo es su malestar?
¿Cómo se integra y participa de otra cultura? ¿Cómo lo afectan las
migraciones? ¿Cómo se acentúan o borran las diferencias? Y
fundamentalmente, ¿cómo puede el psicoanálisis proseguir con su tarea
de construcción artesanal de la singularidad en un mundo globalizado?
En
una temática similar, Alberto Eiguer introduce su trabajo "El falso
self del migrante", con una consideración acerca de si la práctica
y los descubrimientos del psicoanálisis, a partir del momento en que
devienen un modelo más universal, resisten las diferencias culturales.
¿Qué
sucede con la persona que cambia de cultura después de una migración? ¿Cómo
se adapta? A través de un interesantísimo desarrollo teórico-clínico
el autor nos ilustra sobre sus ideas.
En
"Analistas de adolescentes: una cuestión de fronteras", Elsa y
Eduardo Mandet caracterizan la práctica clínica con adolescentes como
"un trabajo de frontera". Sostienen que la demanda de saber del
adolescente dirigida al analista alude a una pregunta por el ser, una
pregunta sobre la existencia, y que esta demanda convoca al analista a
tomar contacto con los límites de la escena analítica.
¿Cómo
se aborda al adolescente en el trabajo analítico? ¿Qué sucede con los
adolescentes que acuden a la consulta con dificultades para sostener la
angustia que le provoca el contacto con un lugar vacío y no permitiéndose
la interrogación? ¿Puede el psicoanálisis auxiliarlos?
A
través del relato de un momento en el proceso terapéutico de una
paciente adolescente derivada por una anorexia, los autores describen su
modo de abordaje técnico.
En
su trabajo "Animalada. El papel del otro en el origen y en los
procesos de transformación en la perversión", Rodolfo Moguillansky
nos presenta un interesantísimo aporte teórico-técnico a partir de un
paralelo entre una viñeta clínica de un paciente con bestialismo
-tratado por él- y algunas referencias acerca del estudio biográfico que
hizo Sartre sobre Genet.
¿Cuánto
podemos pensar al otro? ¿Cuánto podemos saber del otro? ¿Cuánto el
otro nos puede pensar? ¿Cuál es la amplitud que tenemos en nuestro
espacio psíquico para albergar, admitir y eventualmente comprender lo que
percibimos que es diferente a cómo somos, lo que difiere del mundo con el
que cotidianamente vivimos? ¿Cuánto podemos consentir la expresión de
deseos prohibidos por la cultura?
Estos
son algunos de los interrogantes que introduce su detallada y a la vez
profunda exposición en la que abundan las referencias a su trabajo y a su
contratransferencia, mostrada sinceramente al presentar uno de "esos
casos difíciles" en donde "la elaboración por parte del
analista es condición de posibilidad de los cambios del paciente".
Ada
Rosmaryn nos introduce en su trabajo "Una sociedad que mata la
mirada" con estas palabras: "Las consultas, hoy, en su mayoría,
provienen de sujetos en los que los sentimientos de identidad y existencia
han sido desmantelados o no construidos. Sus vínculos varían entre la
acuciante necesidad del otro y el desprecio, la vergüenza, la ira o el
alejamiento. La capacidad para reflexionar está perturbada; lo impensable
salta al acting o a las expresiones del cuerpo; el placer en los
logros de todo tipo, empobrecido o nulo. Los investimientos narcisistas
lesionados los llevarán a tener que realizar permanentes hazañas que
demuestren lo opuesto: una autovaloración que resulta siempre imposible.
La hiperactividad ansiosa muestra el temor por la pasividad vivida como
muerte".
De
esta forma, la autora aborda el tema de las patologías actuales y las
relaciona con el particular estado de cosas en el mundo de hoy. ¿Qué
lugar tiene un análisis? ¿Cuál es la tarea del terapeuta? En esta
consideración incluye a analistas y pacientes y nos brinda algunas
características de esta díada, particularmente en lo que se refiere a
poder pensar acerca de qué aspectos de la sintomatología de estos
pacientes los hace victimizables de analistas con fallas en el propio análisis
de su narcisismo o capaces de actuaciones inescrupulosas.
En
"Interpretación y/o intervención. Entre el proceso y el
instante", Oscar Sotolano plantea, a partir de su experiencia clínica
y de sus reflexiones acerca de dicha práctica, la relación existente
entre la interpretación y las intervenciones del analista. Después de un
interesantísimo análisis, propone diferenciar la interpretación como
proceso, o como fondo permanente, de la interpretación como instante. La
última estaría más cerca de lo que clásicamente pensamos como
interpretación, mientras que la primera, la interpretación como
proceso-fondo, define el campo en el cual operan las distintas
intervenciones (que merecen en cada caso sus precisiones metapsicológicas),
al mismo tiempo que van construyendo dicho campo.
En
su trabajo "Psicoanálisis hoy", Benzion Winograd se interroga
acerca de si se puede hablar del psicoanálisis en "singular".
Responde que no parece ser una teoría de dirección unívoca y, a partir
de allí, plantea cuestiones referentes a cómo establecer
correspondencias entre los distintos léxicos y posturas psicoanalíticos
y, sobre todo, cómo desde la multiplicidad teórica existente el
psicoanalista examina los problemas que se le presentan en el trabajo clínico.
¿Cómo
un psicoanalista de Buenos Aires en el año 2004, imbuido en su contexto
sociocultural, se sumerge en el registro emocional de la persona a la que
trata? ¿Cómo construye una imaginaria "antecámara teórica"
que le brinde recursos para poder abordar las complejidades de las nuevas
patologías? ¿Qué rol conservan las reglas clásicas de Freud? ¿La
convergencia de teorías disímiles encubre un eclecticismo
"impuro"? ¿Qué sucede con los llamados bordes o límites del
psicoanálisis y sus representantes clínicos, tales como las problemáticas
fronterizas?
A
lo largo de su trabajo, Winograd procura instaurar un debate en el que los
interrogantes superan a las respuestas, permitiendo abrir de este modo
posibilidades de desarrollo en la indagación psicoanalítica.
En
la mesa redonda, "Psicoanálisis contemporáneo", participaron
Susana Bidolsky, Mabel Fuentes, Alicia Levín y Martha Vega. Ellas
plantearon en forma clara y elaborada sus ideas, enmarcadas en distintos
modelos teóricos, acerca de si se puede hablar de un psicoanálisis
contemporáneo y qué implica esta enunciación. Interiorizarse en las
reflexiones allí vertidas, le brindará al lector un panorama actualizado
y profundo.
Desde
Madrid, en la entrevista que le realizara Mónica Vorchheimer, Jaime
Szpilka nos dice: "Cuando se habla de psicoanálisis contemporáneo,
lo que yo observo en las distintas tendencias dentro de las sociedades
psicoanalíticas, así como dentro de la IPA, es un riesgo de dilución
del pensamiento analítico propiamente dicho. Diría una dilución en tres
direcciones: una dirección filosófica, una psicológica-conductista y
otra hacia las neurociencias. Entonces, hablar de psicoanálisis contemporáneo
es hacerlo en este sentido, me atrevo a decir que se trata de una regresión
del pensamiento psicoanalítico a una statu quo ante, una regresión
al pensamiento prefreudiano". Estas y otras afirmaciones son
desarrolladas en este interesante diálogo.
Además,
en este número nos complace incluir los trabajos "Premio 40
aniversario" que nuestra institución otorgó a las más destacadas
producciones presentadas en el XXVI Encuentro de Discusión y XXI
Symposium. Son acreedores de esta distinción los siguientes artículos:
"Prejuicios psicoanalíticos", "Llega la cigüeña...
cuarenta años después. Aportes del psicoanálisis a las técnicas de
reproducción asistida" y "Sobre la clínica de borde".
En
"Prejuicios psicoanalíticos", Rubén Zukerfeld tiene como
objetivo "valorar la evolución de la clínica psicoanalítica en
estos últimos cuarenta años teniendo en cuenta los prejuicios que pueden
existir en la mente del analista, configurando una subjetividad
perturbadora de su práctica y constituyendo una debilidad para el
desarrollo de la disciplina".
Rosario
Allegue, en "Llega la cigüeña... cuarenta años después. Aportes
del psicoanálisis a las técnicas de reproducción asistida",
reflexiona acerca de cuáles son las preguntas y las respuestas que puede
brindar el psicoanálisis frente a los cambios introducidos en la
subjetividad a partir de los desarrollos de las técnicas de fecundación
asistida.
En
"Sobre la clínica de borde", Mabel Fuentes plantea que desde
hace tiempo los psicoanalistas debaten sobre la existencia de nuevas
formas clínicas en relación con pacientes que no se presentan como
neurosis de transferencia y con los que resulta difícil un abordaje
psicoanalítico tradicional. La autora, desde una perspectiva teórica
lacaniana, conceptualiza las diferencias entre estos pacientes y los neuróticos
y los psicóticos, y nos brinda una viñeta clínica en la que quedan muy
bien ejemplificados sus aportes.
Nuestra
querida institución ha cumplido cuarenta años: cuarenta años de
crecimiento, de actividad y desarrollo. En el marco de los festejos de
conmemoración surge este número 28 de nuestra revista, "Psicoanálisis
contemporáneo", que se ha elaborado con el trabajo entusiasta y
generoso de muchos. Reciban todo nuestro reconocimiento.