NÚMERO 29 | Mayo 2024

VER SUMARIO

De la intimidad y la privacidad | Jorge Rodríguez

Una propuesta metapsicológica de la intimidad. Desde Winnicott, a través del jugar –experiencia del estar siendo- el autor enlaza la intimidad con la precariedad, la confiabilidad, la fugacidad y la vulnerabilidad del ser humano. Con si mismo, y con otro. Diferencia con la privacidad. Asumir un riesgo. Referencia a lo “negativo”, lo paradojal y lo potencial.

Winnicott define el jugar como experiencia de precariedad a diferencia de lo transicional que consiste en experiencia de omnipotencia.

Omnipotencia como experiencia no como mecanismo o pensamiento, que posibilita la paradoja fundamental de la creatividad: crear lo dado, crear lo que existe.

La precariedad es la experiencia opuesta, antitética, contraria, de la omnipotencia. Se hace experiencia de que lo dado no es creado o dicho de otro modo, la omnipotencia es precaria, fugaz. En el caso del jugar, que  su magia termina, tiene límites, culmina y aparece realidad. En rigor y paradojalmente, la precariedad del jugar crea realidad.

El jugar plantea la precariedad y la intimidad.

“Se trata de la precariedad de la magia en sí misma, de la magia que surge de la intimidad (intimacy), en una relación considerada confiable (reliable)”

Se anudan intimidad, precariedad y confiabilidad, y agregamos vulnerabilidad.

La intimidad requiere permanecer vulnerable cualidad inherente a toda dependencia profunda de otro; experiencia intermedia; es fugaz; se da con la intensidad propia del jugar; en un estar relacionándose con otro; en reciprocidad y mutualidad y exige confiabilidad ambiental. 

Toda una metapsicología de la intimidad en una frase.

La vulnerabilidad expresa vicisitudes de la continuidad de estar siendo; en dependencia, la necesidad de otros que atiendan y protejan de lo imprevisible, de las heridas o rupturas de, y en independencia e interdependencia plantea la reciprocidad y sus riesgos. 

Vulnerable, inherente al experienciar estar siendo y la necesidad de dependencia, ese más allá de lo pulsional, es decir, que ni autoerotismo ni narcisismo alcanzan. 

Se da en el lugar, la zona de superposición, en el inter juego, en el entre dos, es decir, no es interna. De ahí que no se trata de privacidad o de lo privado, aunque a veces se confundan.

Fugaz alude a su variabilidad, su aparecer-desaparecer, como los sueños.

Presenta esa “tremenda intensidad de las experiencias no-culminatorias  (no orgásmicas, no pulsionales)  que llamamos jugar”, y Winnicott agrega tratando de asir qué es intensidad, que se trata de un rasgo que tiene equivalencia “con lo que sienten dos personas enamoradas…pensemos en esa ‘electricidad’ que parece generarse en un contacto íntimo o significativo”. Sin intensidad no hay intimidad, jugar ni amor.

Se vive en las “experiencias del estar relacionándose-relacionarse con objetos” que Winnicott diferencia de relación de objeto que designa lo pulsional. 

El relacionarse objetal es un experienciar intermedio que siempre tiene como condición una cualidad ambiental, es decir, algo no personal ni subjetivo, en este caso se trata de la confiabilidad que otro brinda. 

Lo intermedio está anudado a la dependencia, a cualidades de la presencia del otro ambiental. Además, en la intimidad es necesaria la mutualidad y reciprocidad.

Íntimo: todo aquello relacionado con la continuidad de estar siendo.

Intimidad: experiencia en reciprocidad del estar siendo.

Intimar, compartir vulnerabilidad, además, y paradojalmente, significa obligar a responder. 

 

Privacidad e intimidad comparten profundidad, intensidad, de ahí su equivalencia; se diferencian por el lugar donde se dan: interno e intermedio respectivamente.

La fugacidad y la intensidad, a su vez, son rasgos compartidos con el jugar y los sueños.

¿La profundidad/intensidad de dónde proviene? Del arriesgar vulnerabilidad inherente a lo vivo, al vivir, al estar siendo, al Self. Solo muere lo que vive. Experiencias múltiples de finitud nos aguardan.

Intimidad, experiencia  donde se arriesga y comparte vulnerabilidad.

Lo intermedio es su espacio; la vulnerabilidad es lo que circula, lo que se arriesga, de ahí la profundidad y la intensidad. La reciprocidad y mutualidad su dinámica.

Intimidad depende de una cualidad ambiental, que el otro sea vivido como confiable. De ahí que la confiabilidad sea impensable, es posibilitada, o no, por otro. Sin riesgos no existe.

Intimidad y privacidad tienen rasgos equivalentes también vamos a plantear sus diferencias.

 

Privacidad, privado

Freud habla de realidad psíquica inconsciente, Klein de mundo interno

Masud Khan utiliza privacy, Winnicott private Self.

“En el centro de cada persona existe un elemento incomunicado (en castellano en el original)”, privado y sagrado.

Lo incomunicado, dice Winnicott; incognoscible, Freud. Sagrado: algo muy valioso, a preservar, a permanecer privado e incomunicado, que puede ser incomunicable o no-comunicado.

Piensa las amenazas e intrusiones ambientales a esa privacy como

violación del núcleo del Self, 

“la violación sexual (rape) y el ser comido por caníbales, son meras bagatelas comparadas con la violación (violation) del núcleo del Self.” De todos modos no es simple separar una violación de otra. El concepto de dolor las expresa.

También lo piensa como “pecado contra el Self” Pecado no religioso, se trata de un ultraje a lo sagrado.

Violación no sexual, pecado no religioso, dolor, angustia impensable.

 

Con el concepto de violación señala la forma en que lo ambiental hace intrusión en la zona y el estado de inmadurez del  infant, es decir, en su vulnerabilidad, estar todo el tiempo al borde de una angustia impensable.

Inmadurez requiere de madurez ambiental, del cuidar, atender, proveer. Si la madre ambiente, de algún modo, disocia las necesidades erógenas y de auto-conservación de las necesidades de estar siendo del infant, puede “satisfacer plenamente pulsiones orales brindando una alimentación satisfactoria” y al mismo tiempo, llegar a estafar al satisfacer, estafa en la satisfacción las necesidades de ser, de estar siendo del infant.  

Otra idea original estafa de las necesidades de estar siendo, la agrega, a violar

Winnicott escribe “es posible gratificar las pulsiones orales brindando una alimentación satisfactoria y simultáneamente violar (las bastardillas son de D. W. Winnicott) el funcionamiento del yo del infant o aquello que más tarde será celosamente custodiado como el self, el núcleo de la personalidad”

 

Lo sagrado son los procesos del Self, en rigor, el núcleo del verdadero Self.

Los procesos del Self se van desarrollando con los procesos de maduración en su relación con lo ambiental. Se descentran de lo pulsional, ya que no son satisfechos mediante autoerotismo ni narcisismo, tienen como condición la dependencia de lo ambiental.

“Una alimentación satisfactoria puede ser una seducción y traumatizar si se realiza sin proteger el funcionamiento del yo del infant” Y usa seducción concepto  de Freud como equivalente a violación.

Formas y efectos de intrusiones ambientales: seducción, estafar al satisfacer, violar, ultrajar lo sagrado. 

Con Winnicott plantea dos tipos funcionamientos: del Ello y del yo; Ello señala lo pulsional (necesidades del Ello escribía) y yo la relación de dependencia del infant con lo ambiental. 

 

En diversos textos utiliza: maduración del yo, desarrollo del yo, funcionamiento del yo, experiencias del yo como equivalentes y diferentes a procesos de maduración y procesos del Self en su relación con lo ambiental

Yo es usado como equivalente a procesos, para pensar el pasaje de la inmadurez a la madurez. Procesos constituidos por: integración, personalización, realización plantean la dimensión “psíquica”, habitar el cuerpo y la relación con el mundo externo; la madurez conservando inmadurez es lo que crecimiento plantea. Este desarrollo no se da sin cuidados suficientemente buenos ambientales.

Maduración, crecimiento, desarrollo formas de plantear su metabiología.

 

El concepto de lo privado del Self o Self privado, será usado como equivalente a verdadero Self, y a lo sagrado que tiene debe permanecer inviolable.

El pecado contra lo sagrado del Self designa la posibilidad de su violación. Lo sagrado no sólo lo planteará en términos de comunicación como aquello incomunicado o incomunicable. 

Lo private, la privacy  se enriquece si lo relacionamos con los rasgos esenciales del verdadero Self, que serán formulados en términos negativos, paradojales y potenciales

 

Lo negativo,

“Aunque las personas sanas se comunican y disfrutan del comunicarse, plantean otros rasgos de importancia equivalente: ya que cada individuo 

  • está permanentemente no comunicándose (not-communicating) (del silencio) 
  • es un (ser) aislado (isolate); (problema de la soledad)
  • permanece permanentemente en estado de no ser conocido (unkwon) (del secreto)
  • y de hecho no encontrado (unfound) (del estar escondido, del aparecer-desaparecer)”

Cualidades esenciales del verdadero Self se expresan y constituyen en Winnicott las formas básicas de lo intermedio: soledad, silencio, secreto, escondido, además de lo transicional, el jugar, lo cultural. La intimidad es otra forma básica de lo intermedio, así como privacy es un nombre de lo inconsciente.

Freud estudia las formaciones de lo inconsciente, por ejemplo, el sueño, la fantasía. 

 

Lo paradojal

Paradoja (lo negativo es positivo) se opone al diferenciar, donde negativo no es positivo.

Lo paradojal conserva en lo negativo un positivo potencial, y en lo positivo un negativo potencial. La paradoja está constituida por lo potencial, se expresa mediante lo potencial.

  • no estar comunicándose conserva comunicación potencial y estar comunicándose conserva no-comunicación.
  • no ser encontrado, permanecer escondido, oculto (hidden) plantea  un ser encontrado (found) potencial,  y ser encontrado, un potencial permanecer oculto 
  • no ser conocido conserva ser conocido (known) potencial, permanecer conocido conserva un potencial no ser conocido.
  • no ser encontrado, permanecer aislado (isolate), plantea un potencial ser encontrado y ser encontrado conserva un potencial no ser encontrado, un permanecer aislado.

Parecen trabalenguas, lo paradojal exige esa formulación.

 

Lo potencial

Lo negativo, las formas negativas son sanas si conservan lo potencial, es decir, su positivo, y si expresan paradoja; por ejemplo, al no ser conocido, conservar lo conocido potencial.

Negativo, paradoja y potencial son tres rasgos esenciales de lo inconsciente en Winnicott. Así como en Freud la atemporalidad, el estar fuera del tiempo lineal y cronológico, y la no primacía de la antítesis son características central de lo inconsciente.

Toda una metapsicología de lo inconsciente nos aguarda:

  • su tópica, en Freud como subjetiva y en Winnicott como intermedio-ambiental.
  • lo económico como libido y ganas de, respectivamente.
  • lo dinámico, a su vez, como representaciones y fantasías, por un lado, y el experienciar, por el otro.

 

Buenos Aires, febrero 2024

Bibliografía

Rodríguez, Jorge. “Las ganas de…”Soñar con los dedos. Entre Freud y Winnicott. Bs. As. L. Viva 2019. 3ra ed.

Winnicott, D. W. “El jugar” Realidad y juego. Bs. As. Granica. 1972.

  —-      “La comunicación y la no comunicación…” Los procesos de maduración y el ambiente facilitador. Bs. As Paidós 1990.

Acerca del autor

Jorge Rodríguez

Jorge Rodríguez