Caminar por la ciudad de Buenos Aires es cruzarse con rincones y con propuestas de todos los colores, estilos y profundidades.
Nos topamos con obras vivas, obras que crecen y se transforman con el aporte, la astucia, y la estética de probados creativos que pasan por ahí.
En un soporte diferente, como en los muros y en las veredas, encontramos mensajes con manifestaciones de sectores antes invisibilizados. Estos mensajes están motorizados por la crítica, la pregunta y, muchas veces, por la exhortación. Vemos paredes irreverentes que transgreden, que sacuden y que impactan. La calle está abierta. La calle habla y convoca.
Caminamos por Palermo y nos dejamos sorprender por sus colores, por sus mensajes y su arte, y podemos confirmar que las calles de este barrio se convirtieron en un museo a cielo abierto.
Las fotos de estos murales, verdaderas obras de arte, ilustran este número de la Revista.
Fotos de los MURALES que ilustran este número de la Revista:
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